THE HOST (GWOEMUL, Corea del Sur, Terror, 119 Minutos)
Dirección: Bong Joon-ho.
Guión: Bong Joon-ho, Hah Joon-won, Baek Chul-hyun.
Reparto: Song Kang-ho, Byun Hie-bong, Park Hae-il, Bae Doo-na, Ah-sung Ko.
Música: Lee Byung-woo.
Valoración: 8/10
Resumen: Kang-du es un humilde quiosquero que vive junto a su hija y su padre junto al río Han. Todo cambia cuando un monstruo mutante surge de las aguas causando el caos y llevándose a Hyun-seo, su hija. Kang-du y su familia se enfrentarán a todo tipo de contratiempos mientras intentan rescatar a la pequeña de las garras del monstruo.
Crítica: El cine de terror actual está construido sobre patrones, tópicos y una alarmante dosis de infantilismo. A pesar del enorme número de producciones que tocan el género, ningún producto llegado desde Estados Unidos parece intentar escapar de los nuevos dogmas del terror. Hollywood lleva ya años revolviendo en el lejano oriente a la busca de nuevas ideas que revitalicen un sector en decadencia, pero lo que ha encontrado fuera de sus fronteras eran historias de ínfima originalidad que ha terminado por quemarse vía remake. The Host, sin embargo, no es un sencillo filme de terror. La base de la trama, es cierto, se centra en el típico survival horror con monstruo de por medio, pero en este caso ese factor es lo de menos. La película de Joon-ho es un manifiesto en contra de los clichés más repetidos del género y un sorprendente alegato político y social. Las continuas sorpresas argumentales, la atípica definición de sus personajes, los ácidos toques de humor, la espectacularidad de sus escenas combinada con la angustia que provocan y su original narrativa (que salta de personaje y lugar cuando le place), son los alicientes que Joon-ho pone en juego para camuflar, tras ellos, una auténtica película de denuncia social. Los múltiples símbolos que utiliza el cineasta y sus correspondientes interpretaciones son una auténtica legión, y sirven primordialmente para retratar a una sociedad sumisa y servil ante su indeseado visitante. No ya el monstruo, sino el gobierno títere que intenta darle caza y el imperio que lo manipula en su propio beneficio. Brillante alegoría de las reivindicaciones sociales surcoreanas, The Host es además una película cargada de entretenimiento que hará por igual las delicias de los fanáticos del terror y de los que esperan mayor profundidad cuando se sientan ante la gran pantalla. Una película sobresaliente que hace propia la verdadera meta de su género: retratar a través de lo sobrenatural los verdaderos miedos de nuestro día a día.
O.K.: Su naturaleza alegórica y su ruptura con los más manidos clichés del género.
K.O.: Que se perciba como una simple película de terror más.
KTARSIS 