Crítica: HANNA, de Joe Wright

HANNA 7/10 (HANNA, Estados Unidos 2.011, 111 Minutos, Thriller. Con Saoirse Ronan, Eric Bana, Cate Blanchett, Tom Hollander, Olivia Williams, Jason Flemyng, Jessica Barden. Escrita por Seth Lochhead, David Farr. Dirigida por Joe Wright.)

Sinopsis: Hanna ha pasado toda su vida en el bosque donde su padre se ha dedicado a entrenarla duramente para convertirla en una auténtica máquina de matar. Cuando por fin la chica está lista su progenitor la envía a la civilización con la misión de matar a una peligrosa espía que es la mayor amenaza para la supervivencia de ambos. De la mano de una nueva amiga la inocente Hanna descubrirá que el mundo exterior es muy distinto a como se lo había imaginado.

Crítica: Joe Wright se enfrenta por primera vez con esta Hanna al thriller de acción, un género en teoría más comercial donde los bien llamados «autores» tienen la mala costumbre de patinar escandalosamente, expuestos al desconcertante dilema de plegarse a las demandas de un estudio ávido de resultados comerciales o de mantener su identidad y coherencia creando una obra destinada, por desgracia, a una minoría. A esta problemática Wright y otros pocos privilegiados le han encontrado la mejor solución con una propuesta que mezcla ambos extremos. Hanna es intensa, misteriosa e inquietante, toda una delicia para el público, pero también supura en cada plano la personalidad de su máximo responsable, un director que ha demostrado por suerte ser incapaz de renunciar a su creatividad. Combinando conceptos dispares como los cuentos de los hermanos Grimm, la acción propia de la saga Bourne, la locura surrealista del más desatado Terry Gilliam, la instensidad adrenalínica de Corre, Lola, Corre y el proceso de madurez que dibujaría cualquier road-movie indie, Wright crea una amalgama de géneros extraña, sí, pero también con personalidad propia. Hanna es así la propuesta más chocante que ha dejado el género en cartelera en años, pero lo bueno es que a pesar de su rareza, funciona como entretemiento masivo gracias a una nueva demostración de inteligencia de Saoirse Ronan, de carisma de Eric Bana y de arrollador talento de Cate Blanchett. El trío se ve bien arropado por un montaje brioso e imaginativo y una puesta en escena que mezcla parajes mágicos, acción en plano secuencia y lo más decadente de una Europa casi apocalíptica, escenario terrible en el que la inocencia de la protagonista se hace pedazos ante la dura realidad. Pese a que en algún momento la esencia elemental de la trama choca, por tópica, con la portentosa propuesta visual, Hanna es una película osada que demuestra que a veces es en ser diferente donde reside la clave del éxito.

Estreno en España: 10 de Junio.

Crítica: PIRATAS DEL CARIBE 4 – EN MAREAS MISTERIOSAS (PIRATES OF THE CARIBBEAN – ON STRANGER TIDES), de Rob Marshall

PIRATAS DEL CARIBE 4 – EN MAREAS MISTERIOSAS 5/10 (PIRATES OF THE CARIBBEAN – ON STRANGER TIDES, Estados Unidos 2.011, 138 Minutos, Aventuras. Con Johnny Depp, Geoffrey Rush, Penélope Cruz, Ian McShane, Kevin R. McNally, Astrid Bergès-Frisbey, Sam Claflin, Stephen Graham, Tamayo Perry, Gerard Monaco, Óscar Jaenada, Paul Bazely, Deobia Oparei, Keith Richards. Escrita por Ted Elliott, Terry Rossio. Dirigida por Rob Marshall.)

Sinopsis: Se dice en Londres que el legendario Capitán Jack Sparrow busca una tripulación para zapar en busca de un increíble tesoro. Sin embargo la verdad es que Sparrow ha terminado como tripulante de La Venganza de la Reina Ana, un navío al servicio del terrible pirata Barbanegra y de su hija, la astuta Angélica. Ambos ansían encontrar La Fuente de la Eterna Juventud, un botín tras el que también van los españoles y los británicos, ahora comandados por el capitán Barbossa. El caso es que el éxito de todos ellos dependerá de Sparrow, que es realmente el único que conoce la ubicación exacta del tesoro. O bueno, puede que no.

Crítica: Zarpa esta cuarta parte de Piratas del Caribe con nuevo capitán y recién estrenada tripulación hacia, se nos dice, aguas misteriosas, cuando en realidad son los mismos mares ya explorados en anteriores ocasiones. Se confirma así lo peor, que a pesar de los cambios se sigue con la tendencia decadente de la franquicia, ahora convertida más que nunca en la atracción de parque en la que se basa. El filme de Rob Marshall, inspirado en algunas coreografías pero poco más, es de nuevo piruetas, saltos, golpes y acrobacias, todas ellas de un nivel técnico notable logrado a costa del sacrificio casi impío de su guión, reducido aquí a la mínima expresión y convertido en un mero «los personajes van del punto A al B». Sin nada que justifique este derroche de acción y la convierta en emocionante las más de dos horas de azaroso viaje se hacen tan agotadoras como un Johnny Depp que por fin se encuentra en la película correcta para su invariable interpretación. Salvan la aventura los viejos capitanes Rush y McShane, divertidos, atroces y bien seguros de cual es su trabajo en un barco que hace aguas y al que su excesivo metraje hace un flaco favor. Si la primera parte fue una deliciosa sorpresa, la segunda un descarado episodio de recaudación y la tercera el indicativo de que el formato estaba acabado, esta cuarta se convierte en un olvidable legado que por momentos no llega ni a entretener. Más de lo mismo, sí, pero peor. Está claro que es hora de quemar los barcos y disfrutar del botín tierra adentro.

Estreno en España: 20 de Mayo.

Crítica: EL INOCENTE (THE LINCOLN LAWYER), de Brad Furman

EL INOCENTE 6/10 (THE LINCOLN LAWYER, Estados Unidos 2.011, 118 Minutos, Thriller. Con Matthew McConaughey, Marisa Tomei, Ryan Phillippe, William H. Macy, Josh Lucas, John Leguizamo, Margarita Levieva, Frances Fisher, Bryan Cranston, Michael Peña. Escrita por John Romano. Dirigida por Brad Furman.)

Sinopsis: Mick Haller es un peculiar abogado criminalista que se desenvuelve como pez en el agua trabajando siempre al límite de la ley. Gracias a eso Haller es uno de los letrados más cotizados por todo tipo de clientes, desde estafadores a gángsters. Un día el abogado es contratado por un adinerado joven para defenderle en un sencillo caso de agresión. Lo que en principio parece una tarea sencilla se convierte en una auténtica pesadilla para Mick cuando comienza a investigar a su cliente.

Crítica: Mucho se habla desde la crítica de grandes expectativas que terminan en dolorosas decepciones, de obras que suscitan gran esperanza y terminan acabando con la ilusión de su público. De este delito se acusaba a de The Lincoln Lawyer, lo cual no hacía esperar que la película fuera nada más allá del típico thriller judicial cargado de giros y lecturas morales que termina por aburrir al respetable, por reiteración del concepto, en sus minutos iniciales. De hecho, puede que el resultado final de la película no sea más que eso, pero Brad Furman ha logrado sacarse de la manga algunas pruebas de peso que logran salvar el honor a su obra. El Inocente, extraño título made in España para la película, goza de una atractiva narración y de un buen ritmo gentileza de un director que se muestra conocedor de la causa desde el inicio del proceso, retratando el mundo amoral en el que se mueven sus personajes con gran soltura. No desentona en la defensa un magnífico Matthew McConaughey, que tomándose por fin en serio a sí mismo y a su personaje y derrochando, como se espera de él, un carisma canalla, carga con acierto con el estrellato de la cinta. Testigos de esta transformación por parte del actor son los miembros de un reparto plagado de caras conocidas que logran formar un universo en el que ley y justicia entran en continuo conflicto a través de los dilemas de cada uno de sus personajes. Puede ser culpable de derrapar, por exceso de ambición, en una correcta conclusión múltiple y también de acarrear durante todo su metraje todos los tópicos del género, pero su capacidad de entretenimiento pesa de forma determinante a su favor. Absuelta de todos los cargos.

Estreno en España: 13 de Mayo.

Crítica: FAST & FURIOUS 5 – A TODO GAS 5 (FAST FIVE), de Justin Lin

FAST & FURIOUS 5 – A TODO GAS 5 6/10 (FAST FIVE, Estados Unidos 2.011, 130 Minutos, Acción. Con Vin Diesel, Paul Walker, Dwayne Johnson, Jordana Brewster, Tyrese Gibson, Chris “Ludacris” Bridges, Elsa Pataky, Joaquim de Almeida, Sung Kang, Gal Gadot, Matt Schulze, Don Omar. Escrita por Chris Morgan. Dirigida por Justin Lin.)

Sinopsis: Dom, Brian y Mia son ahora tres de los fugitivos más buscados en los Estados Unidos. Con la intención de mantenerse a salvo de las fuerzas del orden de su país llegan a Río de Janeiro, donde faltos de fondos aceptarán un trabajo que les enfrentará al poderoso Reyes, un hombre que tiene en su mano el control criminal de la ciudad. Para agravar la situación llega a Brasil Luke Hobbs, un persistente policía que hará lo que sea para capturarlos. Por suerte el trío recibirá ayuda extra de viejos conocidos.

Crítica: No es sencillo, aunque lo parezca, averiguar lo que solicita el espectador, aún más complicado es lograr ofrecérselo y resulta misión casi imposible hacerlo en repetidas ocasiones. Sin embargo, como sus protagonistas, la saga Fast & Furious ha logrado lo irrealizable hasta en cinco ocasiones, confirmándose como una de las mejores, si juzgamos su calidad en base a la satisfacción que proporciona a sus incondicionales, de lo que llevamos de siglo. Ahí es nada, pero lo cierto es que Justin Lin y su tropa siguen llevando legiones al cine con una fórmula que no es en absoluto novedosa, pero que parece tener la misma capacidad de atracción, sino más, que en sus inicios. Como viene siendo habitual esta quinta parte ofrece lo mismo que sus antecesoras pero en mayores dosis. Si había falta de músculo, ahí aparece Dwayne Johnson, si se necesitaba belleza se incorpora a la irresistible Elsa Pataky y si lo que los fans pedían eran más caras conocidas, por el filme se pasean los rostros más reconocibles de la saga. Todo está diseñado para complacer y por eso no faltan en la secuela los rasgos más reconocibles de una saga calificada como antológica por los adoradores del neumático, la carne prieta y la acción más desmadrada. Ahí están de nuevo las frases lapidarias de Diesel, los actos heroicos de Walker, la mirada pícara de Brewster o la sensualidad de una Gal Gadot ascendida a diosa de la belleza de la franquicia. Ahí están también, por supuesto, las piruetas imposibles, los disparos certeros, los golpes titánicos y los planes más ingeniosos, todo expuesto de la forma más primaria, espectacular y directa, sin espacio para el análisis sesudo o las leyes de la física. Artísticamente inclasificable, Fast & Furious es el gran negocio de la década y un placer, cada vez menos culpable, para los que la han idolatrado desde sus inicios. Aunque esta quinta parte suene a despedida, los resultados hablan por sí solos. No os desabrochéis el cinturón porque vienen curvas.

Estreno en España: 29 de Abril.

Crítica: THOR, de Kenneth Branagh

THOR 5/10 (THOR, Estados Unidos 2.011, 115 Minutos, Aventuras. Con Chris Hemsworth, Tom Hiddleston, Anthony Hopkins, Natalie Portman, Kat Dennings, Idris Elba, Stellan Skarsgård, Ray Stevenson, Colm Feore, Rene Russo, Clark Gregg, Jaimie Alexander, Josh Dallas. Escrita por Ashley Miller, Zack Stentz, Don Payne, J. Michael Straczynski, Mark Protosevich. Dirigida por Kenneth Branagh.)

Sinopsis: En castigo a su arrogancia Thor es expulsado de Asgard por Odín, su padre, el sabio rey de aquel lugar. En la Tierra el ególatra dios descubre que es sólo un hombre perdido carente del poder que un día tuvo. Gracias a la científica Jane Foster y su equipo, Thor intentará no sólo recuperar su poderoso martillo Mjolnir, sino también comprender las auténticas responsabilidades a las que debe hacer frente como futuro monarca de Asgard. Mientras, en su lejana patria, su hermano Loki tiene su propio plan para alcanzar el trono.

Crítica: Si sobre el papel se supone que las piezas van encajando en la compleja estrategia narrativa de Marvel, en la realidad lo cierto es que salvo por efímeras alusiones a ese universo cohesionado cada filme de la marca funciona exclusivamente como un ente independiente. Con Thor Marvel escribe en teoría otro episodio en su en apariencia intrincada colisión de universos, pero lo cierto es que el filme es tan sólo otra muestra más del cine actual más comercial que comete los mismos errores y logra los mismos aciertos que sus predecesoras. Sorprende por tanto que para llevar a cabo esta empresa puramente recaudatoria se haya confiado en un autor -esta es una palabra clave- como Kenneth Branagh, cuyo currículo como director distaba hasta ahora mucho de las chanzas propias del espectáculo más palomitero. Puede que Branagh llegara a Thor para afinar el discurso de sus maquinaciones palaciegas y tragedias familiares, y lo cierto es que es en esos momentos de política asgardiana cuando más visible es la presencia del director. Luego, como muchos antes, Branagh desaparece en un mar de efectos especiales y situaciones grotescas, personajes desdibujados y una narración atropellada. En Thor, como viene siendo habitual en este tipo de espectáculos, las cosas ocurren porque deben ocurrir y sus protagonistas se comportan como se les ordena. En la trama no hay sensación de avance, ni en las relaciones que unen a sus héroes atisbo alguno de química, pasión o lógica. Thor, no se malinterprete, cumple como entretenimiento pasajero, que es de lo que va el asunto, pero no alcanza ni de lejos las exigencias del fan ni el baremo de calidad que se había marcado la nueva Marvel para retratar a sus héroes más icónicos. Diversión digna, notable carta de presentación para jóvenes como Hiddleston, Alexander o Hemsworth y aumento de la cuenta corriente de otros como Portman o Hopkins, este Thor cinematográfico es la enésima superproducción que olvida que todo su majestuoso despliegue de medios destinado a seducir los sentidos, no está reñido con la narración rigurosa de una historia. Así este Dios del Trueno se resume en mucho ruido y pocas nueces.

Estreno en España: 29 de Abril.

Crítica: LA LEGION DEL AGUILA (THE EAGLE), de Kevin MacDonald

LA LEGION DEL AGUILA 5/10 (THE EAGLE, Estados Unidos – Reino Unido 2.011, 114 Minutos, Aventuras. Con Channing Tatum, Jamie Bell, Donald Sutherland, Mark Strong, Denis O’Hare, Tahar Rahim. Escrita por Jeremy Brock. Dirigida por Kevin Macdonald.)

Sinopsis: La mayor obsesión del joven centurión Marco Aquila es recuperar el águila de la Novena Legión, una tropa que comandó su padre y que se perdió para siempre en los lejanos bosques de Britania. Con el fin de recobrar el estandarte y restituir su honor el legionario cruzará el muro de Adriano y se adentrará en un mundo extraño acompañado únicamente por Esca, un esclavo britano del que desde ese momento dependerá su vida y el éxito de la osada misión.

Crítica: El peplum abraza al cine de aventuras con más fuerza si cabe convirtiéndose en los últimos tiempos en un subgénero tácito del mismo. Las clásicas disputas políticas, batallas antológicas y juegos de poder han dado paso a la acción y a la lucha por la supervivencia, transmitiendo la sensación de que tal vez Roma por sí sola no logra atraer al público necesario a un género que salvo por puntuales coletazos, agoniza en el olvido. Por esos senderos inicia su camino La Legión del Águila, mostrándose en sus comienzos como una obra de sencillas aspiraciones, entretenida, bien realizada y muy dinámica. Son los mejores momentos de una cinta que con el paso de los minutos cae en el inmovilismo más tedioso víctima de múltiples errores de peso. Busca Kevin Macdonald crear una obra trascendente cuando lo que tiene entre manos es un relato de aventuras que en manos de otros han dado obras no inolvidables, pero sí más apetecibles. El cineasta se pierde en discursos sobre el imperialismo, en cuestionables decisiones sobre el diseño de producción y ante todo en cargar el peso de su obra en la relación entre sus dos protagonistas, demasiada responsabilidad para un intercambio de golpes -unos dialécticos y otros no tanto- aderezados de una previsible ambigüedad moral de ambos caracteres que se resuelve sin sorpresas. Por supuesto ahí está el inevitable extrañamiento del que se siente culturalmente indefenso en un territorio no sólo ajeno, sino también hostil, la lucha por la superviviencia ante enemigos de aspecto indescriptible y la restitución del honor por encima de cualquier sacrificio necesario, temática principal de la cinta. Culminando su decadencia con un final bochornoso por su descarado y simplista aleccionamiento, El Águila traslada a su público la triste sensación de que el peplum, como la propia Roma, vivió tiempos lejanos de esplendor y gloria que probablemente jamás regresen.

Estreno en España: 8 de Abril.

Crítica: SOY EL NUMERO CUATRO (I AM NUMBER FOUR), de D.J. Caruso

SOY EL NUMERO CUATRO 4/10 (I AM NUMBER FOUR, Estados Unidos 2.011, 109 Minutos, Ciencia Ficción. Con Alex Pettyfer, Teresa Palmer, Timothy Olyphant, Kevin Durand, Dianna Agron, Jake Abel, Callan McAuliffe. Escrita por Alfred Gough, Miles Millar, Marti Noxon. Dirigida por D.J. Caruso.)

Sinopsis: Número 4 es un extraterrestre que se refugia en la Tierra tras la destrucción de su planeta natal bajo la identidad de John, un joven retraído que ha vivido toda su vida aterrorizado por la posibilidad de que los que aniquilaron a su raza le encuentren. Cuando John llega a un pequeño pueblo de Ohio sabe que sólo será una parada más en su eterna huida, pero allí John conoce a una chica de la que se enamora a la vez que empieza a descubrir sus nuevos e impresionantes poderes con los que intentará plantar cara a sus enemigos y proteger su nueva vida.

Crítica: Está claro que cuando algo funciona pronto le salen imitadores, pero también es evidente que el éxito no es sinónimo de calidad. A la fórmula del «chico conoce chica en instituto de pueblo y lucha por ella contra los obstáculos que surgen en su camino» se ha añadido en los últimos tiempos el ingrediente de lo sobrenatural. El paria de antaño, que superaba sus limitaciones y se convertía con esfuerzo en alguien mejor, ha dado paso al díscolo individuo de la actualidad que no es un marginado real sino un solitario de pega que elige ese estado para proteger un secreto que le hace de hecho superior a aquellos que le intentan apartar por no ajustarse a la normalidad establecida. Ya no hay espíritu de superación, sino esnobismo, elitismo y misantropía. Cámbiese vampiro por extraterrestre con poderes igualmente lumínicos y torsos al mismo nivel de descamisamiento y tendremos Soy el Número Cuatro, nueva víctima de la nueva ola de romances adolescentes entre chico raro pero guay y joven bella pero incomprendida que tanto ha triunfado entre el público adolescente menos exigente. Precisamente por su propuesta infantiloide cargada de tópicos argumentales que alcanzan también su puesta en escena, el filme de un perdido D.J. Caruso se antoja como entretenimiento exclusivo de su espectador objetivo, ya que aburrirá al resto con sobredosis de romance ridículamente frustrado que sólo es aderezado por la acción prometida en su último tramo. No son todo malas noticias, ya que la película puede aprovecharse como carta de presentación de algunos jóvenes actores que pretenden dar que hablar en un futuro no muy lejano, aunque aquí aparezcan como maniquís impersonales. Gracias a esta debacle tomamos contacto con el solicitadísimo Alex Pettyfer, la bella Teresa Palmer cuya única misión en la cinta es animar el cotarro y la ya afamada Dianna Agron, una chica que es todo candor y sensibilidad. También consuela pensar que una vez visto el plumero el público castigue la fórmula a languidecer olvidada y tal y como se temen sus protagonistas en la ficción esta número cuatro sea la última de su raza. La lástima es que en el negocio, como en la ficción, al final son siempre los números los que prevalecen, sobre todo si están impresos en una cuenta corriente.

Estreno en España: 8 de Abril.

Crítica: SIN LIMITES (LIMITLESS), de Neil Burger

SIN LIMITES 6/10 (LIMITLESS, Estados Unidos 2.011, 105 Minutos, Thriller. Con Bradley Cooper, Robert De Niro, Abbie Cornish, Anna Friel, Johnny Whitworth, Andrew Howard, Robert John Burke, Darren Goldstein, T.V. Carpio. Escrita por Leslie Dixon. Dirigida por Neil Burger.)

Sinopsis: Eddie Morra ha fracasado en todos los ámbitos de su vida. Es incapaz de comenzar su libro, su novia le ha dejado y las deudas le acechan. Sin embargo todo cambia cuando cae en sus manos una droga de diseño que le permite alcanzar y aprovechar al máximo todo su potencial intelectual. Desde ese mismo instante Eddie se convierte en un triunfador del que todo el mundo habla. En la cima del éxito Eddie comienza a percibir en cambio que no todo son beneficios y que su vida podría estar en serio peligro.

Crítica: Hoy en día aspirar al éxito total no es una opción, sino una ley tácita de una sociedad ultracompetitiva. Los caminos que llevan a la cima son sin embargo sinuosos y están repletos de trampas, el esfuerzo y la rectitud no aseguran en absoluto alcanzar las metas y por tanto el surgimiento de elucubraciones poco realistas como la que tenemos entre manos no son de extrañar. Limitless tiene como interesante idea de base una propuesta descabellada que garantiza un atajo seguro hacia el triunfo y la autorrealización más completa. Juega la obra de Neil Burger con los sueños del respetable, retratando a través de un canalla, destrozado y correcto Bradley Cooper, la ilusión del ciudadano de a pie de ponerse de la noche a la mañana en control total de su propia vida, de convertirse súbitamente en quien maneja los hilos a su voluntad. La potencia de esta premisa y la primera parte de la película sostienen una obra digna que se desploma en su tramo final, trasladando al espectador la incómoda sensación de que todos los alicientes que ofrece la propuesta, combinados con las múltiples lecturas y temáticas a estudiar -la adicción, la ambición, el miedo al fracaso- podrían haber generado un producto muy superior. Burger, que hace por momentos gala de una atractiva puesta en escena y un notable sentido del ritmo, languidece sin embargo cerca de la conclusión rebatiendo además gran parte de la lógica argumental que había dispuesto a través de sus personajes -esencialmente de un acertado De Niro- y contradiciendo esas sabias palabras que apuntaban con acierto que no hay atajos posibles hacia la cumbre, ya que el ingrediente esencial de esa fórmula que garantiza el éxito no es el talento, la inteligencia o el carisma, sino la experiencia conseguida a través del duro trabajo.

Estreno en España: 8 de Abril.

Crítica: INVASION A LA TIERRA: LA BATALLA DE LOS ANGELES (BATTLE: LOS ANGELES), de Jonathan Liebesman

INVASIÓN A LA TIERRA 5/10 (BATTLE: LOS ANGELES, Estados Unidos 2.011, 109 Minutos, Acción – Ciencia Ficción. Con Aaron Eckhart, Michelle Rodriguez, Michael Peña), Bridget Moynahan, Ne-Yo, Ramon Rodriguez, Cory Hardrict, Jim Parrack, Gino Anthony Pesi. Escrita por Chris Bertolini. Dirigida por Jonathan Liebesman.)

Sinopsis: Tras una vida dedicada al ejército un veterano sargento está a punto de retirarse cuando ocurre lo imposible. Una fuerza alienígena ataca la Tierra y en un desesperado intento de mantener a salvo el Oeste, los Estados Unidos deciden centrar sus esfuerzos en defender Los Angeles. Allí el sargento deberá liderar a un nuevo escuadrón para salvar a un grupo de civiles.

Crítica: Battle: Los Angeles juega a darle la vuelta a la situación geopolítica actual y convierte de nuevo a los Estados Unidos, tantas veces potencia agresora en la realidad, en la víctima heroica que suele interpretar en la ficción por obra y gracia de su industria del entretenimiento. Cual en Red Dawn marciana los americanos responden a esa superpotencia hostil y extranjera que ataca al indefenso con la malvada y alevosa intención de privarle de sus recursos más preciados -¿les suena?-, con patriotismo, honorabilidad y valor incomparables, virtudes unidas a un sobrecogedor sentido del sacrificio que siempre es tachado de radicalismo cuando lo practican naciones con menos glamour. En esta explosión de cine palomitero por antonomasia que podrían haber dirigido conjuntamente Michael Bay y Roland Emmerich durante el mismísimo 4 de Julio, Liebesman retrata a los militares como la solución final a los problemas reales que sufre cualquier nación y a los civiles de, en el mejor de los casos, molesto peso muerto que necesita de todo tipo de cuidados y atenciones por parte de sus defensores. El filme se salva en gran parte por la efectiva puesta en escena de la que hace gala su realizador y por su invitación tácita a no ser tomado demasiado en serio, pero la efectiva pirotécnia no evita que el espectador avispado se cuestione si lo que está viendo es realmente una película o un largo anuncio publicitario sobre las virtudes de las fuerzas armadas del Tío Sam. Personajes arquetípicos envueltos en situaciones surrealistas, bichos aparte, se mezclan con lacrimógenos discursos y candidaturas a la Medalla al Honor en este híbrido de Black Hawk Down e Independence Day que desde luego cumple con lo que promete: acción sin descanso, destrucción masiva, escenarios apocalípticos y gente en pleno ataque de nervios. También, por supuesto, el show es el tributo definitivo a su poderoso ejército y a su incansable espíritu, un saludo a la bandera, un homenaje a las tropas y ante todo una declaración de amor a las armas. He aquí, amigos, la americanada del siglo XXI.

Estreno en España: 1 de Abril.

Crítica: EL MECANICO (THE MECHANIC), de Simon West

EL MECÁNICO 4/10 (THE MECHANIC, Estados Unidos 2.011, 93 Minutos, Acción. Con Jason Statham, Ben Foster, Donald Sutherland, Tony Goldwyn, Mini Anden. Escrita por Richard Wenk, Lewis John Carlino. Dirigida por Simon West.)

Sinopsis: Arthur es un metódico asesino a sueldo conocido en el mundillo por su capacidad para pasar desapercibido. Gracias a sus habilidades Arthur recibe el desagradable encargo de acabar con su jefe. Lo peor es que el hijo del anciano, Steve, comienza a buscar venganza convirtiéndose en un blanco fácil para quienes encargaron el asesinato. Arthur decidirá entonces poner a Steve bajo su tutela y enseñarle todos los trucos de la profesión.

Crítica: En esto del cine también existe el efecto deja vu. Prueba palpable de ello es Jason Statham, un actor que tiene la inusual habilidad de haber convertido cada una de sus apariciones en diversos episodios de las que parecen las mismas aventuras de un único personaje. Statham, que interpretativamente da para más pero que ha encontrado su lugar en la acción más superlativa ha asumido, como ocurrió anteriormente con otros ídolos del género, tal semejanza con sus roles que es ya imposible separarle de ellos. The Mechanic no es así tanto un remake de la de Bronson como una auténtica «peli de Statham», en la que el británico vuelve a interpretar al solitario metódico, implacable, pero de buen fondo y que, y aquí viene cierta sorpresa, es en esta ocasión menos superhumano y tal vez algo más vulnerable, sensación que demuestra el tipo de relación que mantiene con la espectacular Mini Anden y ante todo la culpabilidad que sufre su personaje a lo largo de todo el metraje. The Mechanic también ofrece como aliciente, además de la variada estopa que reparte el famoso calvo, la inusual presencia de un compañero en pantalla, un Ben Foster hambriento de escenas que poca relación guarda con la personalidad del calculador asesino y que por momentos se hace con el protagonismo absoluto de la cinta. Entre el choque entre ambos, las travesuras de West tras la cámara y un par de predecibles giros de guión transcurre una cinta cumplidora que supone una muesca más en el cinturón de Statham, una nueva demostración de versatilidad de Foster y la confirmación de que el espectador lo tiene difícil si pretende disfrutar del género sin que la memoria le juegue malas pasadas.

Estreno en España: 25 de Febrero.

Más en la red…

• The Mechanic’s Mini Anden Has Maximum Hotness [43 PICS] (coedmagazine.com)
• Badass New Red Band Trailer for THE MECHANIC (geektyrant.com)
• Jason Statham and Ben Foster Exclusive Video Interview THE MECHANIC (collider.com)